domingo, 23 de septiembre de 2012

PELEA DE GATOS


Al cabo de un rato, la rubia se acerca a su marido y le pregunta:
-¡Oye! ¿Tu madre no piensa levantarse hoy? Espero que no le haya dado un yuyu con el aloperidol que le dí ayer tarde. Ah no..., mírala allí, espatarrá en la cama a medio tapar. ¡Uhm! Respira; y bien que lo hace. ¡Mira! mira que resoplidos da. A este ritmo, empalma el desayuno con la cena.
Bueno, observa qué macarrones te he preparado. Te vas a chupar los dedos. Anda, vamos a la mesa y deja la caja tonta que te vas a volver mongolo.
-¿Mongolo yo? Mongola tú. Anda lúcete, que para eso te mantengo. Mueve el culo para mí.
-Oing... ¿Ya has vuelto en ti? Pareces una culebra, siempre aletargao, o serpenteando por la casa. Qué vas a hacer ahora ¿brincar y morderme el cuellito?
-¿Aletargao yo? ¡So lagarta! Que te pasas las noches de coña por ahí ¿Qué se te ha perdido en la calle? ¿Por qué razón no pasas más tiempo conmigo? Deberías estar aquí todo el día sentadita como una niña buena.
-¿Qué te pasa de pronto?, ¿te han amargado los macarrones la sobremesa? Mejor sería que te callaras, y así no sube el pan.
-El pan no lo voy a subir yo pendona, el pan lo sube el gobierno.
-Dirás tu gobierno, porque son a ellos a los que has votado tú y tu incompetente madre; que al ritmo que va el asunto seguro que nos quedamos sin la pensión de la vieja.
-No llames a mi madre vieja. Vieja lo serás tú, que con esos pellejos que te cuelgan del cuello, pareces una tortuga boba.
-Habla, habla, dale al pico; que el día que se me inflame la entrepierna salgo por patas de esta casa y no me vuelves a ver.
-¡Vete y no vuelvas!
-Porque estamos en un bajo. Si viviéramos en un primero te tomaba en brazos y te arrojaba desde la ventana a la puta calle.
-¡Desgraciada! Métete los macarrones donde te quepan.
-Eso voy a hacer, no te quepa la menor duda. Toditos para mí; y si tienes hambre, que tu madre se meta en la cocina y te prepare unas lentejas.
Chao mi amorrrrrr..., me voy a la calle a rular; seguro que encuentro un jamelgo a mi altura.

No hay comentarios: