jueves, 5 de agosto de 2010

LOCO DE ATAR


Hello loco, he contemplado cómo las turistas te rodearon pertrechadas para la ocasión con cámaras que inmortalizaran el encuentro. Pobres turistas, desplazadas desde tan lejos, ataviadas como si fueran de carnaval. Se han apostado a las afueras, cerca de la jaula, y han esperado a que el celador te dejara salir. La de la escarola me ha divertido especialmente, perdida entre sus bucles oxidados, abandonados como por descuido. La otra tonta, la del pelo lacio, a la que no le quité ojo, se te arrimaba como lapa para no quedar fuera del encuadre al tiempo que callejeabais. Han preferido el blanco y negro. Han pretendido revestir el encuentro de un look sesentero.

Loco, te has masturbado en sus narices mientras les recitabas un no sé qué que las ha inmovilizado.

Del cartucho que portaban te han ofrecido sus secretos, has tomado un puñado y los has lanzado al viento como polvo que estorba; avellanas tostadas sin cáscara para la próxima ocasión les has dado a entender. Se han parado en un bar y te han ofrecido de beber. Se han extasiado cuando has preferido el refresco de cola, en contraposición al cubata que las suspendía. No me quedé con la cara de la que llevaba la cámara, parecía la más lista, sólo te enseñaba el pajarito para tenerte entretenido. Eligieron una librería, en lugar de la típica tienda de souvenir, ojearon libros y te sometieron al tercer grado esperando pillarte; como buen estratega que eres les diste con dos palmos en la cara.

Se ha pasado el día y el carrete se ha acabado. Esas coristas de tres al cuarto te acompañaron hasta la jaula para cerciorarse de que entrabas y de que lo que de ti hablan era verdad.

Loco, una vez dentro te has girado y les has dedicado un último adiós con la manita. Loco, sigue a tu aire, que lo estás haciendo muy bien y a ésas que les den por el culo la próxima vez que se quieran hacer la foto contigo. Ale, a seguir bien.

Loco, se me olvidaba, también te he visto en televisión, enfrentado al tarado que filosofaba acerca del hormigón. Me sorprendió ver cómo te encogías de hombros y te regodeabas en tu humo; a pesar de la chanza que les causaste supiste salir airoso. Loco, tú eres grande, por eso los demás se postran y te buscan.

Te pongo un diez, y te recuerdo que no me gusta que llegues tarde a clase a pesar de estar loco de atar. El próximo en preguntarte seré yo.

4 comentarios:

mera dijo...

Tiene una colina?

Makiavelo dijo...

Mera, tiene una Isla con colina.
Ja,ja,ja...

Isabel chiara dijo...

Me recordó al mono del zoo de Jerez. Ya no existe, pero era así de chulo.

Makiavelo dijo...

Pobre mono jerezano, me pregunto si aún sigue en forma.